Yo quiero que me des todo tu aire, quiero que me digas que me amas, que me digas lo que salga de tu alma. Quiero que me abraces como si fuera la última vez, que me beses como si el mundo se acabara a las 6. Acéptalo, no es mucho pedir. Yo te doy más.
¿Cómo puedo arrepentirme si me has dado lo mejor de mis dieciocho años en tan sólo dos meses?
No me arrepiento, ni cuando me das miradas frías.
No me arrepiento, ni cuando no piensas en mi.
No me arrepiento, ni cuando peleamos.
No me arrepiento, ni cuando te portas cortante.
No me arrepiento, ni cuando siento que nada te importa.
No me arrepiento, ni cuando pienso que debería arrepentirme.
No me arrepiento, porque las cosas que me has dado, que me has enseñado... son más.
Los besos, los abrazos, las miradas de amor, las llamadas, los mensajes, los pequeños detalles, las conversaciones nocturnas, despertar a tu lado... Todo. Lo vale.
"Me muero por preguntarte si 'te quiero' y 'te amo' para ti, significan igual o diferente... y si es cierto que yo te amo y tú me quieres"
Mi amor, ojala pudieras darte cuenta de todo lo que hago por ti… de toda la incertidumbre que paso día a día, de los sentimientos encontrados, de todo mi amor y todos mis miedos.
No sé que hacer.
Te quiero tanto, eso es seguro… incluso podría decir que te amo. Sé que todo ha pasado muy rápido, sé que tal vez tú no sientas lo mismo, sé que aunque tenemos un noviazgo… puede que no sientas lo mismo. Me da miedo pensar en todo lo que doy y sentir que no recibo lo mismo, sé que es egoísta pero mi corazón cree que merece un poquito más, tú no?
No sabes cuantas veces me he callado esto, he intentado decírtelo millones de veces, pero cuando estamos juntos… cuando estamos juntos todo es distinto. Todo es mágico, somos uno, no hay nadie más, me besas, te beso, me abrazas, me tomas de la mano y me dices que me quieres y yo te respondo “yo más” pero no como cursilería, sino porque eso siento de verdad… siento que “yo mas”, pero eso tú no lo sabes.
Mi amor, no sabes como me rompes el corazón a veces, no sabes cuanto me duele… pero luego regresas en un segundo y lo pegas, lo arreglas todo, con una mirada, un beso y un puchero.
Cuando estamos juntos, es otra historia... el problema, no, mi problema es cuando no estas conmigo, parece... siento que no te importo. Aunque también sé que me molesto por estupideces como que a veces puedes tardar una hora en responder un mensaje, pero qué le hago? Si escucho comentarios todo el tiempo de " Es que cuando le gustas y quiere hablar contigo responde en chinga!". Alucino, ya sé. Debería no preocuparme por lo que digan los demás. Pero así es el amor, no? Es sinónimo de paranoia. Duele.
Duele el miedo, duele la inseguridad, duele pensar que un día te puedes aburrir de mi, duele pensar que te estás aburriendo de mi, duele estarme volviendo loca por no saber lo que pasa por tu cabeza, duele pensar que tal vez alucino, duele pensar que tal vez no.
Suena enfermizo… te das cuenta de porque me da miedo?
Yo nunca me había enamorado así.
Recuerdo exacto todo, sé como empezó. Cada palabra, cada sonrisa tuya, cada beso. Todo.
Entonces, dime. Dime: ¿Qué hago?, Cuál de las dos opciones te gusta más? me porto indiferente para que me prestes atención, hago berrinches, te digo algunas veces “no” para que pienses más en mi, y me hago la misteriosa… corriendo el riesgo de que te de igual y tengamos peleas sin razón hasta cansarnos? O podría demostrarte todo mi amor y llenarte de cursilerias… corriendo el riesgo de aburrirte.
Me estoy volviendo loca. Literal. Y tú no me ayudas para nada, me gustaría saber que hacer, “se tu misma” dicen algunos… resulta que es difícil cuando tengo mil emociones pasando por mi mente y corazón... todo al mismo tiempo, en sólo 5 minutos. No sé si me has entendido, pero escribiendo esto creo que logre ordenar algunos sentimientos en su lugar.
