viernes, 15 de julio de 2011

First Love (:

Tengo que decir que las "mini-historias", como yo les llamo, 
no las escribo por experiencia propia(: La mayoría se me ocurren 
cuando estoy escuchando música y así.
Cuando publique una que sí sea por algo que me pasó, eso será
lo primero que ponga en el titulo(; jajaja & ya sé que nadie me lee, pero: 


"No dejaría de escribir aunque nadie más me leyese. Disfruto leerme. 
Soy mi lector y escritor preferido."







No sé ni como me llegue a imaginar que tal vez él podía llegar a fijarse en mí.
Sólo se que lo amo, lo amo con todo mi corazón…

Resulta que él y yo sabiamos que existiamos porque estudiamos 
en la misma preparatoria, lo curioso es que antes de todo, yo no
lo había visto como algo más que otro estudiante… incluso me
burlaba de las niñas que morían por él, hasta que un día se nos hizo 
hablarnos. 


Recuerdo que estaba en la biblioteca sacando unas copias para
la clase de historia cuando lo ví… y sí, me puse nerviosa, 
se me hizo extraño. Ahora ya sé por qué.

Creo que así empieza todo, el amor. No te avisa, solo te llega… 
para bien o para mal. 
En resumen… me enamoré de él y él se enamoro de otra.

Después de muchos días de largas platicas en los recesos, 
de mensajes, de escuchar música juntos, me enamoré como 
la niña tonta que soy. Incluso alucinaba con que él me daba 
como mensajes ocultos de que sentía algo por mi.

Recuerdo perfecto los días que pasamos juntos, es como si lo 
hubiera visto apenas ayer y no hace 3 meses, me duele pensar 
que todos los detalles que yo pensé que significaban algo más, 
no eran más que cosas de amigos, me duele sentir 
que lo perdí todo, me duele saber que todo es él…
Cuando me dí cuenta de que no dejaba de pensar en él, que 
buscaba cualquier pretexto para hablarle, para que nos vieramos… 
se suponía que ya estaba enamorada no?, eso es lo que me han enseñado
los montones de películas románticas que he visto!
y fue así que cometí el peor de mis errores… le dije.

Esas son las cosas tontas que provoca el amor, las cosas 
que provocan las ganas de besarlo, las ganas de que fuera 
solo para mí…
No soy muy valiente que digamos así que se lo dije en un 
mensaje de texto y pues nada, el no respondió. 

Me sentía tan mal que lo busqué al día siguiente en 
la escuela (grave error), me dijo que  había recibido mi mensaje, 
pero que no tenía nada que decirme, que él no sentía lo mismo que 
yo y que pensó que si no me decía nada me dolería un poquito menos, 
luego yo le dije que no se preocupara, que ya me imaginaba cual iba 
a ser su respuesta & que quería ser su amiga, me abrazó 
y dije que tenía clase de matemáticas. 
Fui al baño a llorar.

Es curioso lo que el amor que recibes y que das te provoca, 
¿Por qué? porque mi amor me provocó que lo confesara, el lo 
recibió y eso le provocó tal vez quererme un poquito más, aunque 
no de la forma en que yo quería. 
Lo peor del caso es que creo que intentó, creo que el quiso quererme 
como yo lo quería. Eso duele aún más.

Mi mente nunca olvidará la vez en que nos besamos, 
aunque trato de mantenerlo en mis recuerdos mas oscuros… 
él no me dijo, pero me di cuenta.
Yo sentí todo, creo que él sintió: nada.

Ojala pudiéramos decidir qué sentir, por quien y por cuanto tiempo.
Cuando me enteré de que ya salía con otra es cierto que sentí celos, 
es cierto que me dolió, es cierto que quise odiarlo por ilusionarme
y luego dejarme atrás, pero no pude.

Comprendí que no estaba en sus manos, comprendí que 
tenía que quererme para haber hecho lo que hizo, me refiero
a que sería peor para mi a la larga el hecho de que viviera 
una mentira, una mentira que yo conocía.
Pero el hecho de que él intentará sentir amor, ese tipo de amor 
por mi simplemente me hizo quererlo más. Y el hecho de que 
él al darse cuenta de que no podía hacerlo 
y que empezará a salir con otra me hizo desaparecer.

Pero como dije, yo ya había comprendido las cosas, aunque 
eso no significa que estuviera lista para verlo con alguien más, 
así que mi forma de agradecerle que me
haya hecho feliz aunque con poquito, fue ya no existir.
No quise complicarle las cosas, él tiene un corazón hermoso, 
no he conocido a alguien más como él y creo que cuando 
lo haga seguramente me enamoraré. Otra vez.

Él me buscó, me mandó textos y yo le decía que estaba ocupada, 
que no estaba en mi casa, que tenía planes, que estaba enferma, 
que lo extrañaba mucho. Y todo excepto lo último, era mentira.

Y ya pasaron 3 meses, y él es feliz, yo no encontré otra forma de 
desahogarme que escribiéndolo. Y Aunque sufro todos los días por 
mi amor no correspondido, se siente correcto.
Sé que falta poco para que pueda estar con él, para verlo como 
cuando mi corazón no sabía lo que era amar y seremos amigos otra vez.

El corazón funciona de esa forma, al azar, creo que hay que 
arriesgarse, hay que cometer errores, que tal si él hubiese sentido 
lo mismo que yo?, sé que no fue así, también creo que solo hay dos 
posibilidades: Amar o ser amado, pero lo que es cierto es que siempre
hay alguien más de quien poderte volver a enamorar, y un día de estos
va a ser mi turno, un día de estos mis posibilidades se juntaran en un “Y”. 
Amar Y ser Amada.







martes, 12 de julio de 2011

Despedida...


Es inútil hacer algo, cuando dentro de ti sabes que no va a funcionar.
Frustrante el pensar con quien estarás, cuando alguien parecido a ti veo pasar.
Amor, yo se que “tu y yo” ya terminó,
Amor, los sentimientos se pueden esconder,
Amor, nosotros tuvimos que ceder.

Mis ojos muestran las dudas,
Las noches de llanto,
de voces extrañas,
voces ajenas a ti.

Mi cielo, no te quiero perder,
Pero comprendo que te tienes que ir.
Ve con cuidado,
Mandé al viento cuidar tus pasos.
Usa lentes de sol,
Que nadie vea tus ojos cafés
Esos ojos que enamoran.

Extrañaré incluso las discusiones,
Pero no tanto como las reconciliaciones.
Es momento de separar caminos
O estamos siendo victimas de nuestro propio destino?
La verdad es que ya no importa corazón, ve con cuidado.
Que otro día, cualquier otro día espero verte.
Uno que no sea como éste.


Ahora que te dije lo que pienso
Me gustaría escucharte hablar,
Y que ésta no fuera la última vez.
No importa lo que digas,
Solo pretendo guardar el sonido de tu voz,
el sonido del amor

Bien, si no quieres hablar yo lo comprendo.
Sé que es difícil
y sé que aunque no lo digas también te duele.
Mira, estoy tratando de no llorar
Si, para no hacerte esto más difícil…

Vete ya, ha llegado el taxi.
Cierra la puerta al salir, no quiero a nadie más aquí.
Hasta siempre amor.






sábado, 9 de julio de 2011

Mi Primer Mini-historia (:



Desde que tengo memoria, siempre me ha gustado escribir, aunque no lo haga del todo bien siempre lo he hecho, pero nunca había escrito una historia... & ésta es la primera, la que me incitó a escribir más(:





Mi mejor amigo. Eso es lo que el creía que representaba para mi… que equivocado estaba. Íbamos en el mismo colegio y nos conocimos el primer día de 4to semestre, el mejor día de mi vida hasta ahora.

La peor parte de mi vida comenzó cuando íbamos caminando juntos hacia mi clase de Inglés, el siempre me acompañaba y ¡Dios!, cuanto amaba yo eso… 

-…entonces fue cuando ella me dijo que ¡quería conocerte!, ¿Puedes creerlo?- dije con un tono de voz demasiado indignado.

-  ¿y se puede saber que le dijiste?- contestó con mucha curiosidad para mi propio gusto.

- Um… solo que algún día los presentaría- ajá! No…eso nunca pasaría- Daniel? Heeey! Daniel?- No es que el no me estuviera prestando atención… el tenía una idea en mente, una dolorosa idea para mi.

- Sabes Mel?, creo que esa podría ser una muy buena idea- contestó después de unos segundos mientras me abrazaba con esa sonrisa, no, con la sonrisa, con mi sonrisa favorita, esa que solo hacía inconscientemente cuando se le ocurría algo.

- ¿Acaso te has vuelto loco?- pregunté con una cara de horror- Dime que no estás hablando en serio…

-¿Por qué no?, Oh vamos! Melissa te voy a querer más si lo haces- dijo interrumpiéndome, maldito chantajista!- Además creí que Caro te caía bien- esperen..que?, acaba de decir que Carolina me caía bien?

- Sabes que eso no es cierto!- Por Dios! No podía estar hablando en serio.

- ¿Qué te ha hecho?- Pregunto con esa cara de inocencia que ni el se creía, trataba de convencerme y yo sabía perfectamente que cedería… lo sabía!

- Nada… solo la odio.- Ok no me había hecho nada…pero era realmente, insoportable.

- Por favor Melissa!

-Espera… ¿Por qué tanta insistencia?- El nunca se portaba así… raro, muy raro.

- Porque… porque… - ok eso estaba muy sospechoso-  Es bueno conocer a mas personas, ¿No crees?- No, no lo creía. Estaba idiota si pensaba que yo me había creído eso.

-Esta bien, pero me debes una- dije apunto de llegar a mi salón.

¡¿Qué?!, o Yo era la idiota ó me había vuelto demasiado ingenua… voto por la primera opción. En ese momento tocaron el timbre para entrar a clases y se despidió de mí con un beso en la mejilla y un… “eres la mejor, te quiero”, haciéndome la chica más feliz de toda la preparatoria.

Así fue como comenzó todo, los presenté  a la semana siguiente, después de tratar por cielo y tierra de que esos dos no se toparan…hasta que sucedió lo inevitable. Daniel y “Caro”  hicieron clic al instante, juró que pude escuchar el sonidito de un broche siendo cerrado en ese instante, desde ese mismo momento me sentí excluida.

Estábamos en la cafetería cuando me dí cuenta… me dí cuenta de que sin tenerlo ya lo había perdido, fue un día de Enero que dejamos de ser dos para ser tres,  cuando empecé a compartir esa sonrisa que yo tanto amaba, cuando deje de ver esos ojos  cafés que adquirían un brillo especial-solo para mi- cuando estaba feliz, y un día soleado de Marzo cuando perdí todo eso, cuando me entere de que eran novios, cuando llegaron tomados de la mano a la escuela… cuando él llego a mi casa a contarme todo con detalles, cuando yo fingía una estupida sonrisa y me percate de lo egoísta que yo era.

Empezaron a salir juntos…sin mi, obviamente, y no es que yo tuviera muchas ganas de ir con ellos...de ver cuando se besaban, de escuchar cuanto se querían. ¡No! yo no era masoquista; Por mi salud mental yo debía alejarme, y así lo hice, deje de frecuentarlo, dejamos de llamarnos cada noche, dejo de acompañarme a mis clases y lo que más me dolió, fue que a el no parecía importarle, creo que ni siquiera lo notó.

Pasaron tres meses, cuatro, cinco… y todo seguía igual, podíamos pasar uno al lado del otro y ni siquiera nos saludábamos. Por su parte ni siquiera me volteaba a ver, por su parte…solo existía Carolina, por consecuencia…deje de existir para el. Yo hice más amigos, salía con ellos, me divertía… seguí con mi vida, no me hundí en depresión más de un mes, pero nada era igual.

Yo aun lo quería, creo que mas que cuando lo conocí, lo extrañaba demasiado… extrañaba ver sus hermosos ojos cafés, su corto cabello negro, extrañaba ponerme de puntitas para despedirme de el con un beso en la mejilla, extrañaba platicar con el, extrañaba todo, como una maldición… estaba todos los días en mi mente, en mis recuerdos, en mis fotos, ¡Maldita sea! Lo extrañaba tanto… y nunca llore, ¡nunca! Hasta ese día… ese maldito día en que nos graduábamos, ese sería el ultimo día que lo vería, ¿Cómo es que no me había puesto a pensar en eso?, Yo había podido seguir todo ese tiempo, porque aunque no habláramos… yo podía verlo pasar, podía verlo feliz, podía ver esa sonrisa que aunque ya no era solo para mí… seguía siendo la sonrisa.

Ese día mi corazón volvió a latir por 3 escasos minutos, estaba hablando con mi profesora de Lectura cuando lo escuche, cuando lo vi...

-Mel?- nunca mi nombre había sonado tan bien, me volteé y  sentí un vértigo… me sentí mareada.

-¿Sí?- Bravo Melissa! Que inteligente de tu parte!; cuando en eso, de verdad lo vi… tenía lagrimas en el rostro, No! el no debería llorar…

-¿Cómo estás?- preguntó, no soportaba verlo así, el estaba triste, inmensamente triste…

-Estoy… Daniel, ¿Qué te pasa?, ¿estas bien?- ¡idiota! Me gritaba en la mente, obviamente no estaba bien, pero moría de nervios.

-Eso no importa… ¿Tu cómo estas? Contéstame por favor- Me dijo con un tono suplicante. ¿Por qué no me quería decir?, Oh si… tanto tiempo después tenía que perderse la confianza, ¿no?

-Estoy bien, muy bien- Dije con una enorme sonrisa. No mentí, en ese momento estaba perfectamente bien, por que el estaba hablándome, que egoísta era...el estaba llorando y yo estaba feliz.

-Bien, eso es todo lo que importa- dijo dándome una hermosa sonrisa, triste…pero hermosa igual.  Entonces me dio un beso en la frente y se fue, así… sin más.

Después de 1 año seguía preguntándome él por que de su llanto, y mordiéndome las uñas mientras me ponía a pensar en el que hubiera pasado si yo no hubiese sido cobarde y le hubiera dicho lo que sentía, pero ya nada de eso tenía sentido, por que lo había perdido para siempre.

Deje de pensar en el, sabía que si lograba olvidarlo…dejaría de amarlo y eso era lo que yo quería, dejar de amarlo como lo hacía, dejar de hacerme esperanzas de encontrármelo algún día en la calle… que llegara y me abrazara y me dijera que me había extrañado tanto como yo a él. Pero, ¿a quien engañaba?, nunca pude olvidarlo, nunca podría. Aunque llegue a creer en que no me había equivocado con eso de  que no podría olvidarlo pero sí dejar de amarlo. Tonta.
Me mude a otra ciudad, y lo único que esperaba de eso era empezar de nuevo; y en la Universidad conocí a Martín y creo que funciono porque  se ganó mi corazón.  Mi torturado corazón que se quebró tan pronto se recuperó y murió tiempo después junto a la persona a quien amé por primera vez, mi primer amor…

Era Navidad y regrese a la ciudad que me había visto crecer, en esas fechas que se supone debería ser solo amor y felicidad fue que me entere, ¡¿Por qué nadie se había tomado la molestia de decírmelo?! Daniel… mi Daniel había fallecido. ¡Había fallecido!, en ese momento no pregunté ¿Cómo?, ¿Por qué?, ¿Cuándo?, esas y muchas preguntas más no tenían importancia.

Llore… llore hasta que me dolieron los ojos, hasta quedarme sin aire.
Grite… grite hasta quedarme sin voz, hasta darme cuenta que eso no serviría de nada. El no regresaría, el me había dejado! Por segunda vez el me había abandonado, me había dejado sola!, ¡completamente sola!, el había muerto, se había ido, toda esperanza e ilusión se habían ido junto con él… ¡y yo seguía siendo una egoísta! El había muerto y yo seguía pensando eso. ¡Egoísta!, egoísta… mil veces egoísta.

Supe que la causa fue una sobredosis, que se había ido por el camino equivocado, que después de la graduación no volvió a casa, que tiempo después regresó siendo otro, que ya no sonreía, que sus ojos perdieron el toque expresivo que tenían, que trataba de olvidar sus recuerdos con alcohol, que se ahogaba en sus penas, que ya no le importaba nada, lo peor de todo…que fue su decisión.

Yo me sentía mal, no... No había palabra para describir como me sentía, la mitad de mi vida había dejado de existir para siempre, Tal vez si yo hubiera insistido, si le hubiera preguntado más veces que le sucedía ese día de la graduación, si yo lo hubiera buscado, si no le hubiera dejado de hablar,  si tan solo no me hubiera enamorado de el… si no le hubiera contado lo que Carolina me dijo… Tal vez, solo tal vez el y yo estaríamos justo ahora sentados en nuestra banca en el parque cerca del colegio regalándome  una sonrisa, no me importa cual yo solo quisiera ver su sonrisa de nuevo, Quizás fue obra del destino, si es que el destino existe… o quizás el ha dejado de sufrir por lo que fuera que le causaba dolor y ahora está mejor, quizás después vuelva a ver ese hermoso rostro, tal vez o quizás  si exista algo después de la muerte, y  pienso que el estará esperando por mí, y no importa donde, así sea el mismo infierno… será perfecto mientras el esté ahí también.

Pero para eso tendría que pasar mucho tiempo, muchas lágrimas y siendo honesta no tengo idea de si soy lo suficientemente fuerte, no tengo idea de si valga la pena esperar toda una vida para luego descubrir que viví con falsas esperanzas de verlo, porque  ni siquiera tengo la mínima idea de que él este en ése “después”, ¿Quién me asegura que el “después” existe?, Y si en verdad existe… ¿Para que esperar tanto si puedo ir ahora?, Ya se…Tal vez si sea una egoísta al no  pensar en las personas que “me aman y me rodean”, o por lo menos eso escuche alguna vez en la estúpida televisión, pero… ¿Acaso no soy más egoísta al hacer sufrir a esas personas que me aman al verme llorar? Al ver como me consumo un poco más cada día?
Entonces, tomada la decisión me dirijo a la mesita de noche de la recamara en la que he pasado las ultimas dos semanas forzando a mi mente a encontrarle un poquito de sentido a mi vida y saco mi fotografía favorita…Sí, con Daniel. Me siento sobre mi cama y escribo atrás de la foto con mucho cuidado para que mis lágrimas no arruinen las letras marcadas con plumón.

 “No se preocupen por favor. Estaba bien, simplemente ahora estoy mejor. Los amo y Perdón. “

Coloco la foto sobre mi almohada y de nuevo me acerco al cajón, pero esta vez para sacar la pequeña navaja que papá me dio para mi propia “protección” cuando entre a la preparatoria; Mientras tanto hablo con Dios y no le pido que me perdone, solo que me comprenda; y me pregunto a mi misma si a Daniel le dolió tanto como me duele a mi. En todos los sentidos. 
Empiezo a sentir el cálido líquido sobre mi, y el olor me empieza a marear, pero dejo de pensar en eso y me ocupo en llenar mi mente con imágenes de su perfecta sonrisa, su hermosa mirada, sus largas pestañas, su brillante cabello negro, su boca, su recta nariz… y me lleno de ansiedad por resolver mis preguntas del “después”, por verlo, por que ojala encuentren mi nota dentro del drama que seguro esta por pasar, por el método drástico y teatral que tome, por el poco tiempo, por el sentimiento que empieza a inundar mi pecho, ese sentimiento que dice que me estoy equivocando y por la voz que me grita a lo lejos que no me quiso tanto como yo a el, pero le digo que se calle, que se vaya,  que no me importa…  porque pensándolo bien si el “después” no existe me librare de una vida totalmente sin sentido, vacía e infeliz, y si en verdad existe, el mismo paraíso me espera. Así que… ¿Tengo algo que perder?, Mucho; Pero soy una cobarde y la idea de volverlo a ver tan tentadora, Es fácil, Es rápido, Es solo cuestión de cerrar mis ojos y dejarme ir…Daniel. Daniel. Daniel.